Visita Bodegas Portia
El otoño está para ir a por él y eso es lo que hicimos la semana pasada. Fuimos a una bodega impresionante, Bodegas Portia, con unas instalaciones diseñadas por el arquitecto conocido mundialmente Norman Foster.
Muchas veces me preguntan cuál es el vino y la bodega que más me gustan. Y yo respondo que a mí me gustan muchas bodegas y muchos vinos. A veces digo que las bodegas son las auténticas catedrales del siglo XXI.
Yo creo que en el caso de Bodegas Portia me quedo corto. Yo diría en su caso que es la pirámide del siglo XXI. Una palabra. I M P R E S I O N A N T E. Fue una gran visita y sus vinos, del grupo Faustino están extraordinarios.
Bodegas Portia está en Gumiel de Izán y es una de las bodcegas más importantes de Ribera del Duero.
Degustamos sus vinos: Portia Crianza y el Portia Prima.
Desde allí nos fuimos a realizar la segunda parte del recorrido que era tan apetecible como la primera.
Nos íbamos a comer a un restaurante que te dan de comer de muerte, pero hubo una serie de circunstancias que nos hicieron cambiar de planes y tuvimos que comer de tapas y vinos en un lugar que te atienden de muerte.
El cinturón verde de Segovia.
Y de allí nos fuimos al cinturón verde. Hacía un fantástico día para hacer lo que hicimos. El río Eresma estaba que se salía y los árboles que nos rodeaban y el Alcázar, impresionante pues paseábamos junto a su base.
Nos dimos una buena caminata y llegamos al cementerio judío. Esto del cementerio judío es algo increíble que fue el premio a un final de viaje en el que el tiempo nos ayudó enormemente.
Me gusta enormemente el vino, me gustan enormemente las historias que hay alrededor del vino, y cuando te cuentan las historias que hay detrás tu alma sale a relucir.
Varias de las personas que nos acompañaban era la primera vez que venían a Segovia y no podíamos dejar de entrar en Segovia para que vieran que Segovia no solo es maravillosa por fuera sino que lo es también por dentro.
No me canso de verla. Y mucho menos cuando voy acompañando a gente que la visita por primera vez.
Y por supuesto, acabamos con un brindis con el maravilloso vino de Bodegas Portia.